En este post recopilamos cinco textos de su obra La hermana, la extranjera que publicó en 1984. En ella reunió aspectos relevantes de su vida como poeta, mujer activista, lesbiana, negra y madre de dos hijos.
Audre Lorde nació en Nueva York en 1932. Hija de inmigrantes caribeños vivió y estudió en Harlem. Se licenció en Hunter College y después impartió allí mismo clases.
En 1968, tras realizar una beca en Mississippi decidió reorientar su vida hacia el activismo, la enseñanza y la escritura. Ese año publicó su primer libro de poemas The First Cities al que seguirán: From a Land Where Other People Live, The Black Unicorn, Our Dead Behind Us y The Marvelous Arithmetics of Distance.
En este post recopilamos cinco textos de su obra La hermana, la extranjera que publicó en 1984. En ella reunió aspectos relevantes de su vida como poeta, mujer activista, lesbiana, negra y madre de dos hijos.
«Podemos entrenarnos para respetar nuestros sentimientos y traducirlos a palabras que nos permitan compartirlos».
«Empecé a vislumbrar una fuente interna de poder que deriva de saber que, si bien lo más deseable es no sentir miedo, también se puede obtener una gran fortaleza aprendiendo a analizar el miedo»
«Podemos permanecer eternamente mudas en un rincón mientras nuestras hermanas y nosotras mismas nos consumimos, mientras se deforma y destruye a nuestros hijos, mientras se envenena nuestra tierra: podemos quedarnos en nuestro rincón, mudas como muebles, y no por ello sentiremos menos miedo».
«Conocer el miedo nos ayuda a ser libres: para quien se atrinchera/ no hay lugar que no pueda ser/ o no sea/ un hogar».
«Podemos aprender a trabajar y a hablar aún teniendo miedo tal como hemos aprendido a trabajar y a hablar cuando estamos cansadas. Nuestra educación nos ha enseñado a tener mayor respeto al miedo que a nuestra propia necesidad de hablar y definirnos y mientras aguardamos en silencio a que al fin se nos conceda el lujo de perder el miedo, el peso del silencio va ahogando».
Conocida por su activismo. Fue madre negra, feminista, lesbiana y guerrera; y, por supuesto, poeta. Visor publica una antología de sus versos, de la cual reproduzco 5 poemas de Audre Lorde.
MEMORIAL I
Si vienes tan callada como
el viento en la arboleda
oirás quizá lo que yo oigo
verás lo que ve la tristeza.
Si vienes tan ligera como
el rocío entretejido
te acogeré encantada
y te pediré lo mismo.
Puedes sentarte a mi lado
como un suspiro silente y
sólo los para siempre muertos
se acordarán de la muerte.
Si vienes, me quedaré callada y
no te diré palabras agresivas;
no te preguntaré porqué, ahora,
ni cómo, ni lo que sabías.
Sí, nos sentaremos aquí en silencio
a la sombra de distintos años
y la rica tierra entre nosotras
se beberá nuestro llanto.